La formación se interesa también por el proceso expropiatorio para iniciar la ejecución de las obras de la Autovía del Reguerón en su totalidad
Murcia, domingo 20 de noviembre-. Ciudadanos ha registrado en el Congreso, a través de sus diputados Miguel Garaulet y José Luis Martínez, varias preguntas relativas a las obras de los arcos Norte y Noroeste, así como la Autovía del Reguerón. Respecto a los dos primeros, que Fomento se comprometió hace diez años a licitar como máximo en 2012, “queremos conocer los hitos de aprobación de los estudios y proyectos necesarios de las autovías del Arco Noroeste y Norte de Murcia que quedan por tramitar de manera previa a la licitación de las obras, y en qué fecha está prevista la licitación y el comienzo de las mismas”, ha apuntado Garaulet. Además, también inquieren al Gobierno por los plazos previstos para su puesta en servicio, que supondría un enorme alivio para las autovías A-30 y A-7, que soportan en la actualidad intensidades diarias medias de casi 100.000 vehículos cerca de su enlace.
“Sabemos que la crisis paralizó estos proyectos, que empezaron a gestarse ya en 2003 a través de la redacción de sus estudios informativos, pero ahora entendemos que se debería decir claro cuándo tiene previsto Fomento acometerlos”, ha añadido Garaulet. El Arco Noroeste se iniciaría en el kilómetro 373 de la A-30, en las proximidades del enlace de Archena, y conectaría con la Autovía del Noroeste en las proximidades del enlace de Alcantarilla con la A-7. Por su parte, el Arco Norte se conformaría como un tramo de autovía alternativo a la A-7, partiendo de ella al sur Las Torres de Cotillas, cruzando la carretera N-301 y la Autovía A-30, y conectando finalmente de nuevo con la A-7 en el enlace de Cabezo de Torres.
Expropiaciones para la Autovía del Reguerón
Los parlamentarios naranjas también han inquirido al Gobierno por el estado del proceso de expropiaciones para la ejecución de las obras de la Autovía del Reguerón, ya que en 2015 se reanudaron dichas expropiaciones por el procedimiento de urgencia “sin que el proceso anterior haya quedado saldado”, apunta José Luis Martínez, quien destaca que “se comienza la expropiación de nuevos terrenos y viviendas sin haber abonado los impagos anteriores, que ya afectaron a 1.800 vecinos hace seis años, algunos de los cuáles siguen sin cobrar y con escasa información sobre cómo afectará el proyecto a sus terrenos”.