Ciudadanos exigirá al Ayuntamiento que publicite las conclusiones de la comisión, que emitió su informe el pasado 19 de abril
El informe reconoce el buen proceder de la labor fiscalizadora y de control que ejerce en el Consistorio el portavoz local naranja.
Lorca, 25 de abril-. La Comisión de Mediación del Acoso Laboral del Ayuntamiento de Lorca ha dictaminado que “no ha existido acoso laboral” al interventor municipal, José María Pérez Ontiveros, por parte del edil de Ciudadanos Antonio Meca. En su informe, emitido el pasado día 19 y rubricado por sus siete componentes, el órgano descarta el acoso basándose en que la conducta no era encuadrable en la práctica del ‘mobbing’, no se cumple con el critierio de mantenimiento en el tiempo, no había relación jerárquica y en ningún caso se pretendía la destrucción moral o profesional del denunciante.
El informe, incluso, señala que “muy al contrario, existen declaraciones del denunciado [Meca] haciendo referencia a la valía y profesionalidad del denunciante [el interventor]”. De hecho, en el punto segundo de las conclusiones la comisión considera que las declaraciones del portavoz municipal de Cs “se han realizado como consecuencia de la función de control y fiscalización que le corresponde como concejal de este Ayuntamiento en la oposición”. Ciudadanos Lorca elevará un ruego en el próximo pleno del 2 de mayo para que el equipo de Gobierno haga públicas estas conclusiones de la Comisión de Mediación del Acoso Laboral.
El pasado 22 de marzo, el Tribunal de Cuentas abrió diligencias tras la denuncia presentada por el Meca contra el interventor municipal por considerar que compatibiliza sus funciones un día a la semana con el Ayuntamiento de Beniel, sin que el Consistorio lorquino le descuente esa jornada en su nómina, algo que se viene produciendo desde hace 7 años. La denuncia presentada por Ciudadanos señalaba que «es público y notorio que el interventor no acudía a cumplir con su trabajo los jueves al Ayuntamiento de Lorca. Además, el Consistorio de Beniel reconoció documentalmente que tomó posesión del puesto de interventor en acumulación el 29 de julio de 2011 “desempeñando su jornada laboral los lunes por la tarde de 16 a 20 horas y los jueves por la mañana de 8 a 14.30 horas, siendo de todo punto imposible estar en dos lugares a la vez”. Ante esta denuncia, el interventor solicitó la activación del protocolo por acoso laboral, que la comisión finalmente ha descartado.