El candidato al Congreso Miguel Garaulet ha asegurado que Ciudadanos “no va a poner en marcha nuevos impuestos y tasas que repercutan en la clase media y trabajadora, la que más ha sufrido los estragos de la crisis y la que soporta una brutal carga fiscal gracias a las políticas del Partido Popular”. Garaulet ha añadido que C’s tiene previsto bajar dos puntos el tipo del IRPF, que quedaría en una horquilla mínima del 18% y máxima del 43,5%, así como reformar el Impuesto de Sociedades: “No es lógico que gracias a las políticas del PP las grandes empresas acaben tributando a un máximo del 6%, mientras las pymes y autónomos, que suponen el 90% del empleo de este país, lo hagan al 25%”.
Garaulet ha anunciado también una “armonización y racionalización de la actual fiscalidad, con el fin de eliminar impuestos que entorpecen la unidad de mercado”. El candidato señaló que los fondos necesarios para no incrementar la fiscalidad y poder afrontar la reducción propuesta por Ciudadanos saldrían de la “eliminación del despilfarro, los gastos superfluos y las duplicidades en la administración pública, como es el caso de los 30.000 millones de euros que nos gastamos en unas diputaciones provinciales convertidas en chiringuitos políticos que solo devuelven a la sociedad dos de cada diez euros que reciben”. Parte también se lograrían con la revisión de la amnistía fiscal puesta en marcha por el ministro Montoro, que supuso una merma de ingresos de más de 2.600 millones de euros. La clase media y trabajadora también se vería beneficiada de nuevas exenciones en el impuesto de suceciones y del hecho de que el de patrimonio pasaría a ser estatal, con el fin de que tributen también los bienes en el extranjero.
Sin ciudadanos de primera o de segunda
Garaulet, que mantuvo un encuentro en el restaurante Julián de la carretera de La Alcayna con representantes de barrios, pedanías y urbanizaciones de Molina de Segura, también aseguró que Ciudadanos “no cree que haya ciudadanos de primera o de segunda dependiendo de su lugar de residencia, todos tienen que recibir unos buenos servicios porque todos pagan sus impuestos y cumplen con sus obligaciones”. “Deben ser las administraciones públicas las que cumplan a su vez y den los mismos servicios a todos los vecinos, vivan en el centro urbano, una pedanía o una urbanización”, señaló Garaulet.